La emoción de sentarse encima de ella, de montarla, de acariciarla entera, de sentirla rugir entre tus piernas, de hacer que se desboque como una manada de caballos salvajes, de no pensar y dejarse llevar, de sentir la adrenalina como va subiendo desde la punta de los dedos de tus pies hasta tu estómago hasta estallar en una carcajada sin contención en tu boca, el olvidar el mundo que te rodea y concentrarte en las sensaciones, sentir su olor, su calor, su nervio...
La sentencia de muerte, el olor al rechazo, las caras de pena al pasar, mirar el miedo a los ojos en los espejos, el vacío, la ausencia, el llanto de una madre, la preocupación encarnada, el tatuaje emocional que te recuerda el pasado, las pesadillas en las noches de invierno, la soledad de un condenado, los charcos en las tardes en que tus ojos llueven, el pasado que no cambia y el futuro que no controlas..
Porque una vez basta, tanto en la moto como en el sexo, "ponte el casco"
Día mundial del SIDA.
2 comentarios:
Magnífica comparación...Excelente la frase final...¡Muy bueno!. Besos
Excelente la comparación....
Carpe Diem
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