martes, 12 de marzo de 2013

12.03.2013 Runner

Por las mañanas cojo el autobûs con el famoso R. Ahora sólo nos saludamos y nos sentamos relativamente cerca y nos pasamos todo el trayecto con el móvil, sin hablar. 

La gracia es que cuando nos bajamos de él, R, literalmente hace un sprint hacia su puesto (no es que lleguemos tarde, si no todo lo contrario, media hora antes que todo el mundo).  
"autoregalo" de Bruselas
Mi teoría era que lo hacía para evitarme...y se ha confirmado, porque hoy se ha montado M. (el #3 en la jerarquía del equipo) y en vez de sprintar, ha ido andando con él.
Cada vez me hago más de teflón con estas cosas...

No hay comentarios: